Qué ver y hacer en Belgrado en 2 días, la joya escondida de Europa del Este
Belgrado es actualmente la capital de Serbia, además de ser una de las ciudades más pobladas de los Balcanes. Sin ninguna duda en los próximos años se va a convertir en un destino turístico de primer nivel puesto que tiene todo lo necesario para serlo. Es una ciudad barata, bonita y con mucha historia, además de ser muy fácil de recorrer por libre.
En este post os voy a proponer qué ver y hacer en 2 días en Belgrado, una ruta por la ciudad que hice yo mismo cuando estuve y que es perfecta para una escapada corta, pero que no dejará indiferente a nadie. Todas las fotos que voy a ir poniendo a lo largo de esta entrada son mías, así que podréis ver de primera mano el itinerario que hice en la antigua capital de Yugoslavia.
Día 1 en Belgrado
- Parque Kalemegdan
- Fortaleza Kalemegdan
- Iglesia Ruzica
- Calle Kneza Mihaila
- Plaza de la República
- Hotel Mockba
- Congreso Serbia
- Iglesia St Mark
- Parque Tasmajdan
- Skadarska
Parque Kalemegdan
Al levantarse el primer día nos dirigimos al parque Kalemegdan, en cuyos alrededores se juntan el Río Sava y el Danubio, ¿qué mejor sitio para comenzar nuestra aventura en Belgrado? En este parque hay bastantes cosas insólitas, empezando por decenas y decenas de tanques y de vehículos militares expuestos a los lados del camino, hasta estatuas de dinosaurios, pasando por campos de basket al aire libre del Partizan y del Estrella Roja, hasta unas vistas panorámicas súper chulas. En definitiva, es un muy buen lugar para empezar tus primeros pasos en Serbia y dejar que te sorprenda el entorno.
Sin duda es uno de mis lugares favoritos de la ciudad, y un pulmón en el centro de la misma en el que se respira mucha historia y tranquilidad. En este mismo parque también se encuentra el zoo de la capital. También es recomendable ver la Iglesia Ruzica, situada en un enclave privilegiado, así como la fortaleza y la torre del reloj.
Calle Kneza Mihaila
Esta calle es sin duda la arteria principal de Belgrado, por eso de las mejores cosas que puedes hacer en la ciudad es pasear por ella. Supongo que pasarás varias veces por esta calle durante tu estancia en la capital serbia, puesto que mide un kilómetro de largo en pleno centro.
Nada más salir del parque, puedes enlazar con la calle y recorrerla hasta la plaza de le República, el siguiente destino. Eso sí, no pierdas la oportunidad de ver los edificios que datan del Siglo XIX y XX, de las familias más pudientes de la época. Los fines de semana suele haber bastante ambiente, y es un lugar perfecto para hacer compras o para tomarse algo tranquilamente antes de seguir con el itinerario.
Plaza de la República
Cuando se finaliza de recorrer la calle anterior, te encuentras con la Plaza de la República. Prácticamente se puede decir que es la plaza más importante de Belgrado, albergando el Museo y el Teatro Nacional. Destaca en el medio de la plaza una estatua del príncipe Miguel a caballo, quien expulsó a los turcos de los territorios serbios en el Siglo XIX.
Hotel Moskva
A escasos 5 minutos a pie de la Plaza de la República, llegamos a este hotel emblemático de la ciudad. La verdad es que merece la pena pasarse para hacerse una foto aquí y observarlo, pues queda una instantánea bastante curiosa.
El hotel Moskva se encuentra en la plaza Terazije, una plaza muy céntrica en la que se reúnen muchos locales.
Tiene una fuente, la cual con el famoso hotel detrás resulta un lugar bastante agradable a la vista.
Puedes reservar una habitación en el hotel, ya que sigue funcionando como tal desde hace más de un siglo, e incluso puedes ir al spa que se encuentra en sus instalaciones.
En esta misma plaza, se encuentra el Palacio Albania, uno de los primeros rascacielos que fueron construidos en los balcanes, y edificio más alto de Belgrado durante los años 40. Como curiosidad, en 1944 este emblemático edificio sirvió para anunciar la liberación de los nazis de la ciudad, cuando se colocó una bandera en él.
Parlamento de Serbia
A escasos 10 minutos andando del hotel, nos encontramos con el parlamento de Serbia. También está al lado del siguiente destino en la ruta, la Iglesia de San Marcos.
Como curiosidad, en la época que fuimos nosotros, además de banderas de Serbia, justo en los mástiles de la entrada también había alguna bandera rusa.
Iglesia de San Marcos
Después de ver el parlamento, hay pocos minutos caminando tranquilamente hasta esta iglesia, icono de la ciudad. Esta iglesia data de 1940 aunque tras los bombardeos de la guerra tuvo que ser reconstruida casi en su totalidad. Se puede entrar gratis y aquí, en la cripta de la iglesia están enterrados el último rey de la dinastía Obrenović, el rey Aleksandar y su mujer Draga Mašin.
Justo a continucación de la iglesia, se encuentra el parque Tasmajdan, donde puedes aprovechar a dar un paseo con los últimos rayos de luz del día.
Después de este día intenso por las calles de la capital balcánica, os recomiendo ir a uno de los típicos pubs serbios de la ciudad, ya que son muy acogedores y bastante baratos, y lo más importante, ¡va mucha gente local! Por lo que puedes observar cómo es la vida nocturna en sus locales tradicionales. Suelen ser sitios pequeñitos pero hay muy buen ambiente y casi siempre hay bastante gente.
El pub que más me gustó de Belgrado es The black turtle, totalmente recomendado. Nos tomamos unas cervezas rojas espectaculares y nos trataron súper bien. Si quieres saber también dónde tomar algo puedes visitar esta entrada sobre comida y algún pub que visitar en la ciudad.
Skadarska
Recomiendo cenar en esta calle y darse una vuelta por sus alrededores porque es un sitio con mucho encanto y con muy bien ambiente. Se come bien en casi cualquier restaurante de esta zona, aunque en la mayoría hay que reservar porque siempre están hasta arriba de gente, especialmente los fines de semana.
En la mayoría de restaurantes hay músicos rondando de bar en bar, incluso dentro de los comedores en los que van tocando música típica mientras estás cenando. Es súper recomendable cenar en esta calle.
Día 2 en Belgrado
- Museo Nikola Tesla
- Edificio bombardeado
- Templo de San Sava
- Monumento de Karađorđe
- Belgrade Waterfront
- Monumento a Stefan Nemanja
- Antigua estación de tren de Belgrado
- Barrio Zemun
- Millenium Tower
Museo Nikola Tesla
Nada más empezar la segunda jornada, recomiendo visitar el museo de Nikola Tesla, personaje histórico por defecto de la ciudad.
Es un museo interactivo porque hay visitas guíadas (nosotros la hicimos en inglés) y te van explicando un poco todos los utensilios y partes del museo, incluso hay alguna parte de show en la que te dan como unos sables de star wars y te los hacen levantar a todos a la vez para que veas cómo se conduce la electricidad. También sacan voluntarios para darte unas pequeñas descargas eléctricas (a mí me sacaron y es poca cosa, pero es divertido).
Es 100% recomendable, a mí me gustó mucho. Como curiosidad, está pegado a la embajada de España.
Edificio bombardedo (Antiguo ministerio de Defensa)
Tras salir del museo, vamos a ir a uno de los lugares que más os van a impactar de la capital, puesto que son edificios bombardeados que siguen en pie aún hoy en día. Es difícil de buscar la ubicación, así que os dejo aquí la calle. Está en Kneza Milosa, 33-41.
Los edificios fueron bombardeaedos por la OTAN en 1999 ya que eran diferentes puntos estratégicos como eran el ministerio de defensa yugoslavo o distintos edificios de funcionarado del antiguo país de Yugoslavia.
Este ataque no fue aprobado por la ONU, por eso el país quiere dejar en pie estos edificios para que se vean los estragos que causa una guerra y las consecuencias.
Templo de San Sava
Después de 20 minutos caminando, llegamos a uno de los puntos más emblemáticos de Belgrado actualmente. Este templo es una de las iglesias ortodoxas de más dimensiones del mundo. Está dedicada a San Sava, un antiguo serbio ortodoxo muy influyente para la religión. Está muy bien conservada, de hecho, está como si estuviera recién construida. De verdad que está súper bien conservada y es una parada obligatoria si tienes planeado visitar la capital de Serbia. Personalmente, me gustó hasta más que la de Sofía, y tiene una capacidad de miles y miles de personas.
Si vas por el pequeño parque en el que se encuentra la iglesia hasta el final, te encontrarás el Monumento de Karađorđe, en el que hay una vista bastante chula del templo entre los árboles.
Belgrade Waterfront
Esta zona es simplemente un barrio que está acondicionando el ayuntamiento para renovar la ciudad un poco, arreglando los paseos junto al río Sava y construyendo edificios modernos. Merece la pena pasear un poco aunque sea a la orilla del río y observar el paisaje.
Monumento a Stefan Nemanja
Muy cerquita del barrio anteriormente mencionado, se encuentra este monumento situado en una plaza bastante grande. Este monumento fue de los que más me gusto de Belgrado, la verdad es que es diferente y colorido.
Lo que se puede observar detrás de esta estatua es la Antigua Estación de Tren de Belgrado, un edificio también muy bonito.
Barrio Zemun y Millenium Tower (Torre Gardos)
Llegamos sin duda a uno de los lugares con más encanto de la ciudad, el barrio de Zemun. Está alejado del centro por lo que hay que llegar en bus hasta aquí, pero no es complicado.
Este pequeño barrio antes era un pueblo separado de Belgrado, aunque ahora pertenece a la capital. Llegó incluso a ser parte del imperio austro-húngaro. Tiene las calles de piedras y casas de un estilo completamente distinto al del centro, de hecho, parece que estás en otro lugar completamente distinto cuando paseas por sus calles.
Sin ninguna duda, el mejor sitio para observar el barrio es desde las alturas, desde la Torre del Milenio o Gardos. Hay unas vistas muy bonitas y tienes una panorámica espectacular. Vale bastante poco, creo que eran unos 3 o 4 euros, y merece completamente la pena.
Después de ver el atardecer por el barrio, os recomiendo ir a comer al restaurante Sač, que está a unos 15 minutos andando escaleras abajo y de verdad que está espectacular. Creo que es la comida que más me gustó de Belgrado. Eso sí, mirad bien el horario porque hay días que cierra normal sobre medianoche, pero hay algún día como los domingos que a las 20 ya te está cerrando (a nosotros nos pasó). Menos mal que llegamos a las 19 de casualidad y cenamos súper pronto, de hecho creo que es la vez que más pronto he cenado en mi vida, pero mereció la pena completamente. Si queréis saber más sobre dónde comer y tomar algo en Belgrado, podéis entrar a este otro post en el que cuento detalladamente cuáles son para mí los mejores sitios de la ciudad.
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